Durante la inauguración de un moderno laboratorio y un centro de desarrollo pesquero, se presentó el Plan de Desarrollo Acuícola Provincial.
En el marco de la inauguración del Laboratorio de Toxina y Microbiología y la apertura del Centro de Desarrollo Pesquero y Acuícola en la ciudad de Ushuaia, el secretario de Pesca y Acuicultura de Tierra del Fuego, Diego Marzioni, presentó oficialmente el Plan de Desarrollo Acuícola de la provincia, destacando la importancia de integrar las variables social, económica y ambiental como pilares fundamentales para una acuicultura sostenible.
“El rol del Estado es estratégico, tanto en la regulación como en el impulso de una acuicultura que sea sustentable e inclusiva. Es fundamental que todos los actores participen del proceso de toma de decisiones”, sostuvo Marzioni. En este sentido, el plan busca fortalecer tanto la acuicultura a escala como la pesca artesanal costera y comercial.
Desde el Ministerio de Producción y Ambiente, se promueve una visión transformadora de los recursos hidrobiológicos, apuntando a un desarrollo que beneficie a las comunidades costeras, diversifique la matriz productiva y respete el medioambiente.
El nuevo Laboratorio de Toxina y Microbiología, equipado con tecnología de última generación, permitirá a la provincia lograr autonomía analítica en la detección de toxinas en moluscos bivalvos. Además, la adecuación edilicia realizada permitirá cumplir con los estándares exigidos por SENASA en trazabilidad microbiológica y análisis por HPLC.
Marzioni también puso en valor el potencial estratégico de la mitilicultura fueguina (cultivo de mejillones) como motor de desarrollo tanto a nivel provincial como nacional. “Este espacio no solo será clave para la producción, sino también para la investigación y el conocimiento. Buscamos impulsar el cultivo de peces, crustáceos, erizos y algas, además del repoblamiento de lagos y ríos”, agregó.
El funcionario destacó que Tierra del Fuego reúne condiciones únicas para posicionarse como referente en el continente en materia de acuicultura, y señaló como desafío convertir los recursos disponibles en conocimiento y desarrollo tecnológico. “Queremos ser proveedores clave de genética y tecnología para la acuicultura argentina y sudamericana”.
Finalmente, subrayó la importancia de formar profesionales locales, fomentar la articulación con instituciones científicas y empresas del sector, y avanzar hacia una normativa clara y eficaz. “Las variables social, económica y ambiental son la base sobre la que construiremos el desarrollo acuícola que queremos para abastecer al país y al Cono Sur”, concluyó.
