El significado de crecer y madurar

Para poder analizar un momento o circunstancia por los cuales pueda estar pasando alguien, es muy útil ver qué les pasa a las personas a cada edad a lo largo de sus vidas.

El intento de querer ser eternamente jóvenes tiene que ver con no haber vivido la juventud como tal en el momento que había que vivirla. Las soluciones no se encontrarán en el mundo exterior. Se trata de una etapa para viajar a nuestro interior.

Antes de los 35 años el ser humano trata de construir su vida de acuerdo a su educación, a lo heredado y al medio social. Después de los 36 años empieza otra etapa y generalmente coincide con algún hecho interno o externo que hace cambiar su perspectiva.

El mismo acontecimiento puede ser muy distinto de acuerdo a la edad en la que acontezca. Un niño de 5 años atrapado en un ascensor puede sentir desesperación y para élpodrá ser una experiencia catastrófica. Para alguien de 30 quizá solo sea una incomodidad que no traerá consecuencias para el resto de su vida.

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La vida puede y debe analizarse como si fuera un ciclo. Podemos imaginar la vida complete como si fuera un círculo. La primera mitad representa nuestra juventud y es una etapa de extroversión. Es un tiempo de crecimiento y expansión en todos los niveles, del desarrollo físico, mental, emocional y social.

En esta etapa está incluida nuestra educación, la graduación, nuestra pareja, nuestro matrimonio, nuestro trabajo y el éxito que podamos lograr con él. También comprende nuestra capacidad de hacer dinero y los problemas relacionados. Las soluciones que debamos encontrar para los problemas también serán extrovertidas.

Volviendo al modelo de dos mitades de la vida dentro de ese circulo imaginario, vamos a dividirlo en 10 partes de 7 años cada una e imaginar que doblamos el circulo por la mitad. Cada triangulito de 7 años se toca con otro triangulito en la otra mitad y vamos a poder observar cómo algo que ocurrió entre los 14 y 21 años de edad (3er triangulito de la primera mitad) tendrá relación con algo entre los 49 y 56 años de edad ( 3er triangulito de la segunda mitad). Es decir que todo lo que haga la persona entre los 14 y 21 años va a condicionar como se va a desarrollar la consciencia en la franja etaria de 49 a 56 años.

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Si fracasamos, si tuvimos éxito, si tuvimos muchos temores o lo que nos haya pasado de jóvenes va a repercutir en lo que nos ocurra de más grandes. La crisis de los 40 tiene que ver con lo que la persona vivió o dejó de vivir a los 20 años.

El gran astrólogo Rudhyar dijo: “El hombre se encuentra con su pasado luego de pasar por el punto medio de su vida. Lo que hace cómo resultado del encuentro condiciona a su vez su vida futura.”

Luego de cruzar la mitad de la vida, representada por la mitad del círculo, comienza la vuelta hacia ese mismo punto donde comenzamos. Es en este punto donde necesitamos revalorar lo que hasta ese momento fue importante para nosotros, el exterior, la materialización, el éxito, las relaciones.

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Esta segunda mitad es la de todo lo interior, los problemas que pudieran surgir tendrán relación directa con lo que se dejó incompleto en la primera mitad de nuestra vida.

La vida empieza a cobrar sentido y hay una felicidad insospechada cuando nos vamos conociendo interiormente… pero todo a su debido tiempo.

Por Priscilla Maciel, Astróloga recibida de Casa XI y del STA Uk de Deborah Houlding