En una emotiva jornada cargada de simbolismo y memoria, el gobernador de Tierra del Fuego AIAS, Gustavo Melella, encabezó este domingo en Río Grande el acto oficial por el 215° aniversario de la Revolución de Mayo, junto a la vicegobernadora Mónica Urquiza y diversas autoridades provinciales.
La conmemoración incluyó la tradicional ceremonia religiosa del Te Deum en la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, y luego un acto institucional que convocó a representantes de la comunidad, fuerzas vivas y vecinos.
Durante su intervención, el Gobernador destacó el valor vigente de los ideales revolucionarios de 1810: “Hoy más que nunca, ese espíritu de mayo, ese espíritu revolucionario, tiene que estar en nuestra provincia. No estamos para quedarnos tranquilos ni callados, sino para validar nuestro propio presente y nuestro futuro”, subrayó.
Melella apeló a la memoria histórica como motor de acción colectiva. “Hay que tener muy presente esa idea de revolución, de unidad, de pensar una Patria para todos y no para unos pocos”, enfatizó.
Por su parte, la docente Nancy Beatriz Giménez, del Colegio Antártida Argentina, ofreció un discurso en el que repasó los hitos de la Semana de Mayo y reivindicó la soberanía y la justicia social como banderas irrenunciables. “La libertad no es un regalo, es una construcción colectiva que requiere compromiso de todos”, dijo.
El acto cerró con una presentación del grupo de danzas folklóricas Flor de Ceibo, que fue reconocido por las autoridades por su labor cultural y artística.
La ceremonia contó con la presencia de legisladores, ministros, concejales, autoridades judiciales, representantes de fuerzas armadas y de seguridad, pueblos originarios, instituciones educativas, organizaciones sociales y numerosos vecinos.
