El Concejo Deliberante de Río Grande expresó su rotundo rechazo al Decreto N° 333/25 del Gobierno Nacional, que reduce los aranceles a la importación de teléfonos celulares y pone en jaque la sustentabilidad de la industria fueguina.
A través de una declaración firmada por todos los integrantes del cuerpo, los concejales advirtieron que esta medida “afecta directamente la producción local, atenta contra miles de fuentes laborales y compromete el futuro del subrégimen industrial que ha sido clave para el desarrollo de la provincia”.
En el documento se destaca la preocupación por el impacto social y económico que esta política podría generar, al permitir el ingreso de productos fabricados en el extranjero, debilitando así la competitividad de la producción nacional.
“Esto no solo pone en riesgo puestos de trabajo, sino también más de 50 años de inversión y crecimiento sostenido en un punto geopolíticamente estratégico del país”, remarcaron los ediles.
La declaración también manifiesta el respaldo del Concejo a los trabajadores fueguinos y sus reclamos, considerando legítimas las medidas de protesta ante lo que califican como “un atropello del Gobierno Nacional”.
Finalmente, el cuerpo deliberativo expresó su alarma ante rumores sobre la posible intervención de un Comando Unificado de Fuerzas Federales para reprimir manifestaciones sociales, advirtiendo que se trataría de un grave retroceso en el respeto a los derechos democráticos.
