El agua es esencial para nuestra existencia. Sin ella, no habría vida. Desde que nacemos nos sentimos cómodos en el agua. Es delicada y pura cuando emerge de la tierra como una fuente surgente de montaña, vigorizante al caer en forma de cascada, o caliente al emanar de un géiser. Puede ser transparente y clara, saber a sal, hierro o cal, oler a azufre, o ser gasificada por naturaleza.
El agua puede utilizarse en todas sus diversas formas para mejorar la salud. El conocimiento de sus poderes curativos representa uno de los primeros descubrimientos médicos.
El agua que es naturalmente rica en minerales no solo es beneficiosa cuando se la ingiere, sino también cuando se la utiliza en forma externa para diversas aplicaciones, ya que sus propiedades curativas benefician a todo el cuerpo. Además, no posee efectos colaterales indeseados.
El siguiente capítulo enseña a utilizar el agua para prevenir, aliviar o curar diversas afecciones. Descubramos un tipo de tratamiento médico que hasta puede llegar a resultar
divertido.
Los poderes curativos del agua
Los poderes curativos del agua se descubrieron alrededor del tiempo de Hipócrito, varios siglos antes del nacimiento de Cristo. Los antiguos chinos y romanos promovían los baños y se encontraban bastante avanzados en el conocimiento de los usos y beneficios potenciales del agua.
En la Edad Media, se abandonó la cultura del baño en un esfuerzo por detener la expansión de las enfermedades venéreas, “el flagelo de la lujuria”. En el siglo XIX, Sebastián Kneipp, sacerdote y naturista, redescubrió los poderes curativos del agua. Al sufrir de tuberculosis, una enfermedad considerada mortal en ese tiempo, se trató a sí mismo con diversas aplicaciones de agua y finalmente recuperó su salud.
Como resultado de ello, dedicó treinta años de vida a investigar y perfeccionar los métodos de lo que actualmente se conoce como tratamiento con agua de Kneipp o hidroterapia. Transcurrió un tiempo antes de que los médicos aceptaran sus ideas. Hoy, la hidroterapia de Kneipp aún se utiliza bastante, de la misma forma que en el pasado.
*Autora del libro «Remedios Naturales», Editorial Albatros.
